EL CINE QUE DEFINITIVAMENTE NO QUEREMOS.

A propósito de las jornadas de cine Cuba-Venezuela y la fiesta aniversario de la Villa del Cine.

“…Quieren cerrarte a tu pueblo con llaves de oscuridad… La señora burguesa quiere que vistas de noche y que juegues canasta de espaldas al pueblo…” 

Ali Primera

Dos ediciones atrás escribí para el periodico DEPANA; sobre el cine que tenemos, que lamentablemente aún tenemos y que no es más que el mismo que ellos quieren y el que siguen haciendo, ese cine porno miseria y de números de taquilla, colmado de vergüenza étnica y discriminación, sin lenguaje liberador y casado con el lugar común que para ellos reside en el barrio, pobre, criminal, delincuente, adicto  y que ancla su suerte y destino a ser firmado por un club de futbol; un cine definitivamente alienante y perverso, idiotizante pero perfecto eso sí; hecho a la perfección a no ser por los delay y el sucio en el mini 35,  un cine perfecto con maquillaje excelente, con actuación de star system, un cine que cuesta según cálculos oficiales 150.000 $ y  a eso le han otorgado la definición de cine de bajo costo o cine pobre; (…Pobre desde el punto de vista financiero, pero rico desde el punto de vista del talento o la pretensión estética…) en palabras del mismo Humberto Solas cuando por primera vez hablara de cine en nuestros países pobres ; ahora bien,  no quiero detenerme a  elucubrar ó proponer hipótesis de cuanto debería costar el cine pobre; quiero aclarar desde el principio lo que esta opinión quiere ser y lo que no desea ser en forma alguna, no me jacto de ser un académico, erudito critico del cine; soy al contrario  un activista por un nuevo cine, un cine necesario, un cine pobre, orgullosos de ser pobre, pobre y liberad, este texto tampoco  es una tribuna de panfleto para los cazadores que  a olfato andan sobre el capital de impuestos recaudados para hacer cine cretino y cretinizante, esos que no se leen la ley de cine porque no les interesa pero inescrupulosamente cargan contra las políticas públicas para el cine que debo decir son pocas y nada efectivas en materia de colectivización y poder popular, pero a veces avanzan permitiendo en cierta forma ese germen organizativo que andan en nuestros frentes de batalla desde el barrio, desde la comunitaria y desde los talleres de formación audiovisual en el Pao-Edo Bolívar, en Coco Tv, en la negro Primero y tantos otros que cada vez son más; los otros señores y señoritos  esgrimen argumentos contra un cine “chavista” que no existe aùn lamentablemente, reivindico chavista reivindicándonos revolucionarios; osea que el cine que debiera existir mas que chavista en un cine revolucionario, estos los otros de siempre asisten en cayapa a los concursos de la villa, van a las fiestas privadas de aniversario de la villa, se toman el whisky de contrabando cupo cadivi con los jefes de los festivales nacionales en los coctel festivaleros de hotel,  en la perla del Caribe, arrugan la cara cuando alguien pregunta sobre la gestión y el proceso,cuando miran "Al sur de la frontera", Oliver Stone;  definitivamente  "los enemigos del pueblo no son mas que tigres de papel",como diria el Presidente Mao, despotrican contra la distribución nacional pues no garantiza sus números de taquilla para guiones sin contenido y poco les importan llegar a pueblo, por lo mismo que el pueblo es inculto, el pueblo no tiene derecho, es su lógica y lo seguirá siendo, legitimando al capital privado que por cierto escamotea la venta del cine nacional en los exhibidores privados, pero a estos, los otros de eso ni se dan por enterado, a estos otros los de siempre los enemigos del pueblo, este pueblo de rabia cosecha 500 años les tiene reservado un trago y no preciso de caña de azucar.
No sigo porque podríamos comernos los tres mil quinientos caracteres en epítetos contra esta gente que no…  llegando a de esa manera restarle valor a la discusión política necesaria sobre el mensaje de ese cine o más urgente aun; el papel de ese cine en la dinámica de dominación y ejercicio de poder, donde todos somos espectadores y esponjas de un mensaje perverso bien elaborado por agencias de publicidad y mercadeo, donde aunque parezca paranoia, ese cine deviene en una herramienta fundamental de la guerra silenciosa, ese cine vende y construye como antes dije: esquemas de pensamiento, modos de vida y formas de comportamiento, ese cine  que determina nuestra esencia dejando  de ser  sujetos para mutar en objetos, números, espectadores , tarjetas de crédito.

Un debate está abierto; la preocupación que me trae precisa eco, se viene por fin  y qué bueno;  la facultad de cine en la UNEARTES  un espacio propio por fin con carreras y salidas intermedias para formar nuevas generaciones al servicio  del cine nacional, la misma escuela impagable de Bolívar films,  por fin una escuela propia para un cine propio para el mensaje necesario; pero en días pasados cuando me acercaba por las jornadas de debate de cine Cuba Venezuela en la UNEARTES, (jornadas que dicho sea de paso parecen haber sido convocadas clandestinamente ) no pude más que vislumbrar con honda pena  que el destino de esa escuela   pareciera estar escrito ya, cuando vemos que al frente del proyecto camina gente de la casa productora que celebra sus aniversarios de espaldas al pueblo …“Pierdanse una pue…” diría un hermano guaro;  por ahí ya suenan Thelman Urguelles y sus secuaces para venirse a dar clases en la facultad lo que no puede traducirse en menos que tomársela como se tomaron el cine, se tomaron el lenguaje, se tomaron los gremios, se quedaron con los financiamientos y aun en este gobierno se siguen tomando los espacios y lo que es peor desde los sectores más altos de gobierno la supuesta vanguardia esclarecida de la cultura le abre las puertas; caramba “Pierdanse una pue…”

Es acá donde dejo abierto el debate, es a partir de este llamado; ya que no quieren ni están dispuestos a perderse una, hagamos que se la pierdan y bien perdida, el llamado es nuevamente a convocar contra la vanguardia esclarecida un colectivo fuerte que entienda QUE LA CULTURA NO ES UN PAQUETE DE HARINA PAN EN LA REPISA DEL EXELSIOR GAMA , la cultura es un proceso de construcción , es el quehacer cotidiano  determinante de nuestro sujeto histórico y esa debe ser la tarea revolucionaria a levantar, el trabajo a continuar como herederos del cine de rocha y clemente de la cerda, de Raymundo y Luis Correa, de Humberto solas y de tantos otros compañeros, alzar las cámaras como fusiles que disparan 24 fotogramas por segundo, nuestros brazos de productores ya no más dependientes sino liberados, como comités de espectadores con rango de ley, como impulso de formación y como formadores de formadores, acá no hay lugar a medias tintas, es hora ya de tomar partido y no dejar que se cuelen los zorros y camaleones en nuestra cultura nuestra americana,  vario pinta identitaria, de resistencia y revolucionaria, es hora ya de pasar a la acción, creo y seguro estoy que otros tantos creen igual que las condiciones objetivas y subjetivas están completas, la correlación de fuerzas esta de nuestra acera para esta revolución cultural contra hegemónica que precisa que el cine tome su lugar que le toca en la batalla de las ideas, es hora ya que pasemos al frente, el cine y sus referentes, esto es un llamado a dar pelea, junto con los colectivos de acción y junto a los sujetos sociales comunitarios que deben exigir su digno reconocimiento en el cine comunitario y no en el concurso pequeño burgués comunitario (el de Amazonia films), es hora ya que se sienta y que se oiga de nuestra arrechera de 500 años, que tiemble el espacio público al son del debate , nuevos vientos soplan en nuestras tierras, los tiempos de cerezas  proyectan la esperanza contra el oscurantismo y la soberbia, las políticas culturales deben pintarse de pueblo ya, hagámosle de una vez de la escuela un fortín porque pueblo lo merece, desde el cine tenemos una deuda social gigante con el pueblo y de no pagarla la pagaremos caro tras completarse la tarea burguesa de lograr la construcción desde el seno mismo de la revolución de mensajes alienantes, ”que se pierdan una ya pue…”

Nota urgentemente necesaria:

 Contraviniendo el pensado que dice que la izquierda siempre parte de lo negativo y la negación, creo que es pertinente aclarar que la construcción del mensaje y el cine que SI QUEREMOS va ser posible solo desde el instante en que demos cuenta con que el sentido común dominante germen de la hegemonía  que nos carcome lo visual y lo comunicacional es el enemigo endógeno, una vez detectado y derrotado ese enemigo partiremos entonces con todas la banderas, con todas nuestras manos y por todos nuestros caminos; con las voces e imágenes del poder popular nuestro indoamericano, por el camino del aprender des- aprendiendo; No se trata de parar y sumergirnos en el etapismo, los procesos se construyen parejos muy a pesar del des-acompañamiento del poder constituido que ciertamente a veces es real las comunidades y el poder popular construyen referente y mensaje, es decir que el cine que queremos existe , es real, se palpa y no es panfleto, se oye se siente y también acompaña la batalla contra ese que no queremos y habita hoy en la plataforma del cine, en la universidad y en el ministerio del misterio cultural.